Mary Luz Pérez Osorio y su hija, Erika Tatiana Aguirre Pérez, quienes fueron secuestradas el pasado sábado 1 de marzo en la vereda El Oasis, zona rural de Arauquita, fueron liberadas tras cuatro días de cautiverio. El Ejército de Liberación Nacional (ELN) se atribuyó el secuestro.
La liberación se produjo gracias a la mediación de una comisión humanitaria integrada por el Obispo de la Diócesis de Arauca, Monseñor Jaime Cristóbal Abril González, y funcionarios de la Defensoría del Pueblo. Las mujeres fueron entregadas en un paraje rural del Piedemonte Llanero.
En un comunicado, el ELN afirmó que las mujeres fueron retenidas por supuestamente colaborar con grupos paramilitares en la zona, específicamente con los grupos liderados por alias «Pescado» y «Medina». La organización subversiva alega que Erika Tatiana Aguirre Pérez tenía vínculos sentimentales con personas relacionadas con estos grupos. El ELN hizo un llamado a la población para que no se deje utilizar por estas organizaciones.